http://analitica.com/
El cambio climático es una realidad, aunque muchos aún se esfuercen en desmentirlo, ya no caben dudas de que existe.
Frente a esta problemática no solo cada ciudadano debe realizar su pequeño o gran aporte sino también la industria turística ha de adaptarse. El sector del turismo se está viendo ya afectado por este fenómeno de una manera muy directa, por eso los empresarios hoteleros tienen que acostumbrarse a las nuevas exigencias del sistema, no solo por la colaboración que hay que hacer al medio natural, sino porque cada vez los turistas son más exigentes en este ámbito.
La puesta en marcha de medidas de reducción y adaptación al cambio climático evitará la pérdida de competitividad de los destinos turísticos. Algunos de los retos con los que los Hoteles se enfrentan son:
1. Reducción de la huella de carbono
La huella de carbono es la medida que se utiliza para valorar la cantidad de gases de efecto invernadero que se emiten a la atmósfera. Los hoteles han de concienciarse de la importancia que esto tiene e intentar reducirla al máximo. Muchas zonas turísticas se van a ver en un corto plazo de tiempo muy afectadas por este cambio climático. El aumento de las temperaturas y la escasez de agua será el factor principal en los destinos de sol y playa, y la falta de nieve en los de montaña. Por eso cuanto más se reduzcan estas emisiones mejor para los destinos turísticos que han de luchar contra este fenómeno.
2. Uso de energías renovables
El uso de las energías renovables no es solo un beneficio medioambiental, sino también económico para el establecimiento turístico. Todos los hoteles deberían contar con este tipo de sistema que ayuda a combatir la emisión de carbono y otros gases contaminantes a la atmósfera. La más aprovechada de todas es la energía solar, pero también se están poniendo medios en algunos lugares para beneficiarse de la eólica y la hidráulica.
3. Ahorro de agua y separación de residuos
Los hoteles han de desarrollar iniciativas que ayuden a preservar este bien tan preciado. Riego de jardines con agua reciclada o el lavado opcional de las sábanas y toallas diarias del cliente, son algunas ideas que se pueden llevar a cabo. En cuanto a la separación de residuos, es muy importante que, teniendo en cuenta la cantidad que genera un hotel, puedan dividirse correctamente para su posterior reciclado.
4. Inversión en infraestructuras
Existen hoteles con una larga trayectoria que son reacios a la inversión que supone la adaptación del establecimiento a un modelo de infraestructura más sostenible. Cambio de inodoros por modelos que ahorran agua, sistemas de calefacción más eficiente o, simplemente la estructura y los medios necesarios para el desarrollo de las energías renovables son, a veces, un problema para los empresarios. En este tipo de casos hay que tener en cuenta los beneficios en los que revierte esta inversión pues, con el paso del tiempo no se trata solo de la contribución que se realiza con el medio ambiente, sino de la amortización económica que supone el ahorro energético.
5. Concientización del cliente
Los turistas son cada vez más conscientes con el medio ambiente y exigen hoteles responsables, pero también es cierto que no se trata de una práctica extendida por completo. Por eso es importante desde los hoteles concientizar al cliente de la importancia de llevar a cabo buenos hábitos con el entorno natural. Muchos establecimientos están incentivando a sus clientes a que utilicen la bicicleta como medio de transporte o, incluso, existen otros que las actividades que organizan se desarrollan caminando. La separación de residuos o el ahorro de agua son otras dos medidas que el mismo visitante puede poner en marcha.
Estos cinco pasos deberían ser esenciales para cualquier alojamiento si queremos reducir el impacto de la industria turística en nuestro medio ambiente. Muchos hoteles responsables, además de estas medidas, están desarrollando otras tantas para combatir el tan temido cambio climático.
Fuente: es.blog.responsiblehotels.travel
No hay comentarios:
Publicar un comentario